Como hoy es el día de Andalucía, es decir, fiesta local, sólo lo voy a dedicar a hablar de ciertas chorradas y de algo importante.
Las chorradas empiezan con una del Maúro, aunque esta me parece preocupante porque podría pasar; “Maduro dice que ganaría las elecciones en España”.
De especialistas en chorradas de lujo, uno el Rufián, que en su declaración dijo que sólo hubo violencia de la policía y que él, allí, fue a merendar. Su amiga, la ¿señora? Colau, le supera; ha montado “un taller juvenil de compresas de tela para trabajar el ‘ciclo menstrual consciente’ (toma ya)”. No podía faltar el Tal, que casi el mismo día que el Senado “concluye que Sánchez financió “de forma irregular” sus Primarias con más de 100.000 €”, se lució diciendo que el Consejo de Ministros exótico que se montó en Barcelona, costó… 0 euros, sí, CERO… Claro que, hablando de pasta, el ganador de hoy es… don L.V.G., responsable de gastos de la Subdelegación del Gobierno de Castellón. Este artista, llenaba los depósitos de combustible de cuatro de su familia con cargo a un vehículo oficial que ni siquiera tenía batería. Se ha papeado un pastón y en un año, batió además el record de dietas.
Lo importante de lo que voy a hablar es del asunto de eso que llaman Arco. Es un sitio al que acuden tipos (y tipas, no vayamos a liarla) cuyo único mérito es ser amigos de algún influyente de esos de la comunicación, y apacientan a clientes deseosos de darse un lustre cultural a modo de barniz a brocha gorda para poder lucir en sus casoplones de diseño. Los presuntos artistas lo hacen simplemente para sacar pasta… como sea y a costa de lo que sea. Decir que las cosas que allí se exponen son arte, es una forma como otra cualquiera de ensuciar el término. Allí lo que priva es la falta de educación y lo primordial es tener una jeta importante. Este año, como está de moda, el summum ha sido el asunto de insultar al rey, que es cosa que da mucho lustre y brillo al carné de progresista. Para mayor demostración de imbecilidad se le “exige” al que compre el muñeco que lo queme, a ser posible “el día de la exhumación de Franco” (¡Tan largo me lo fiais…!). En esta pléyade de creadores irreverentes se da una circunstancia muy curiosa. Cualquier cosa que valga para insultar al Rey Felipe o a la Iglesia les vale, pero a ninguno de ellos les pasa por la imaginación hacer lo mismo con una imagen de don Mahoma o del Rey de Marruecos e irlo a exponer a Rabat, o de cualquier dirigente árabe y llevarla a su país de origen. Ni te cuento hacerlo con la del señor Duterte y exponerlo en Manila, porque este presidente es muy amante de los de gatillo fácil o no digamos hacerlo con el Mauro o en La Habana. Así que a eso de tirar con salvas del rey y sin enemigo enfrente no creo dé ningún prestigio. Del prestigio artístico ya he hablado, intentar equiparar estas chorradas con un Velázquez, un Goya, un Miró o con cualquiera de los inventos de Torres Quevedo es como para dar risa. Pero aquí, a cualquier mindundi de estos, lo plantamos en Arco… o le damos un Goya.
Así de primeras, habría que cambiar el título a la exposición, y en vez de Arco, acrónimo que intenta aunar Arte y contemporaneidad, buscar otras siglas, igual de hiperbólicas pero más acordes; por ejemplo, CHOAC, también acrónimo de ‘chorradas actuales’, o cualquier otra cosa que se les ocurra a los gurús del momento. Pero hablar del Arte, me parece que no, que por ahí no arde el puro
De aquí, otra muestra del éxito de los programas de reinserción; “Cae de nuevo la banda de Los Dalton por el robo de 400.000 euros en dos bancos”. Han estado en el trullo hasta hace sólo 14 meses, y desde que salieron ya llevaban varios atracos en Málaga, Marbella y Barcelona.
Claro que para entender esto, hay que mirar a los orígenes; “Málaga Ahora no apoya una felicitación a dos policías locales por multar a grafiteros”. Eso, que cada cual haga lo que le salga del…
Hasta mañana. Pepeprado